El portapapeles de todo sistema operativo es funcional pero a veces, para determinados usuarios, no es realmente útil debido a sus carencias. Corkboard viene a suplir estas carencias, con esta aplicación podremos capturar diferentes datos para usarlos cuando los necesitemos.
Con el portapapeles del sistema operativo podemos copiar (una imagen, texto,...) y pegarlo. Pero si antes de pegarlo volvemos a copiar el primer dato capturado se pierde. ¿No os ha pasado alguna vez que copiáis una dirección de internet y sin daos cuenta copiáis otra borrando la anterior y sin poder recuperarla?. Con Corkboard esto ya no volverá a pasar.
La interfaz de Corkboard
La interfaz de Corkboard es muy similar a lo que vemos con el Dashboard. Cada captura que hacemos se almacena en una especie de “Dashboard” a modo de widget. No se si me explico claramente así que os dejo una captura.
Gracias a su interfaz ver cada dato capturado es muy sencillo, incluso para organizarlos según queramos. De forma que luego es un acto visual encontrar el que queremos usar según el momento. Además incorpora una función de historial que nos permite ver todas las capturas realizadas cronológicamente.
Usabilidad de Corkboard
Al ser tan visual lo que se gana por un lado se pierde por otro. Cuando queremos hacer uso de Corkboard para trabajar más rápida y eficientemente se echan en falta algunos detalles. Por ejemplo no podemos ir capturando rápidamente y mediante atajos de teclado ir copiando cada captura según necesitemos. Por tanto la potencia que ofrece se pierde un poco.
Accesibilidad en Corkboard
Algo que normalmente tendemos a obviar es la accesibilidad. Pero hay usuarios con dificultades visuales e incluso invidentes que usan un Mac. Para ellos la opción incluida en Corkboard es muy útil y de agradecer. Gracias a que Mac OS X incorpora Voice Over, Corkboard hace uso de ello para facilitar el trabajo permitiéndoles escuchar el contenido del portapapeles y navegar entre los datos.
Conclusión
La utilidad y el funcionamiento es bueno. Para muchos usuarios su funcionamiento es tal y como lo quieren además de tener un diseño más o menos cuidado. Y su precio, pese a ser de pago, no es elevado: 9,99 dólares (7,54 euros). También existe una versión para iOS.
Si eres algo más exigente te recomendaría probar otras alternativas que ya hemos comentado en Applesfera como Shadow o iClip.
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