A medida que los AirPods 3 han ido cogiendo popularidad, cada vez más y más personas se preguntan cómo poder limpiarlos. Con el paso del tiempo la suciedad se acumula en las rejillas de esos auriculares como en los rincones de su estuche. Por muy limpios que seamos, es algo inevitable con los residuos corporales nuestra piel y nuestras orejas van produciendo.
Es muy fácil recurrir a usar instrumentos que desde Apple no recomiendan en absoluto para hacer esa limpieza, así que vamos a repasar cómo puedes limpiar tus nuevos AirPods 3 sin arriesgarte a dañarlos y por muy poco dinero.
Un trapo, un cepillo y bastoncillos: todo lo que necesitas
Para hacer una limpieza general tanto del estuche como de los auriculares, bastará con frotarlos usando un paño seco que no deje residuos. Insisto: el paño debe estar completamente seco, no hay que mojarlo ni siquiera humedecerlo con agua o cualquier otro líquido ni en este paso ni en ningún otro de esta guía.
Para eliminar los residuos que queden en la rejilla de los auriculares no debemos caer en la tentación de utilizar objetos puntiagudos, como agujas o puntas de lápices o bolígrafos. Lo adecuado, tal y como menciona Apple en sus guías oficiales, es utilizar un bastoncillo de oídos completamente seco y pasarlo por todos los rincones de esas rejillas para retirar toda la suciedad.
Finalmente también podemos utilizar un cepillo de dientes de cerdas blandas, también seco, para frotarlo suavemente por todos los rincones y así eliminar aquella suciedad que se resista más a salir. Recuerda que el cepillo debe tener las cerdas blandas, no duras. En tiendas como Mercadona, el precio total del trapo, los bastoncillos y el cepillo sólo es de 2,80 euros.
Cuidado con utilizar otros materiales
En algunas guías del pasado os hemos mostrado cómo limpiar los AirPods utilizando masilla adhesiva (el conocido blu-tack), pero Apple no lo menciona en sus recomendaciones y hay foros de Reddit en los que se reportan experiencias negativas. En todo caso siempre podemos utilizarlo para extraer suciedad pegada en el exterior de la carcasa, pero mejor no hacerlo en la rejilla ya que hay riesgo de que la suciedad llegue incluso a quedar más incrustada en el interior de los auriculares.
Algo que hay que tener muy claro es que jamás llegaremos a tener los AirPods como el primer día: su carcasa se raya con el uso y dejará de tener el brillo original con los meses. Es algo completamente normal y que no podremos evitar incluso con limpiezas exhaustivas que pueden llegar a ser excesivas. En caso de minimizar ese deterioro siempre puedes optar por el uso de una funda.
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