Phone House rebaja el símbolo de los Apple Fanboy en la era post-PC: los iPhones

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No hay mucho que se pueda hacer al respecto. Si tienes un Mac y usas un iPhone, seguramente alguno de tus amigos ya te ha condecorado entre risitas como el fanboy del grupo. Y si hablamos de Internet, a lo mejor esa etiqueta te la han querido colgar más bien como si fuera un sambenito.

¿Pero qué significa ser un fanboy? ¿Y qué ha hecho Apple para ganarse su actual reputación como empresa de casi literal culto? Para ello debemos sumergirnos en la historia y viajar años antes incluso de que Apple fuera una idea.

Antes de nada, un vistazo a los antecedentes

Judsonfanboy

Si bien el primer uso registrado de la palabra fanboy nos lleva a comienzos del siglo XX, esta expresión ahora peyorativa y/o afectuosa dependiendo del contexto no se acuñó tal y como la conocemos hoy hasta 1973, cuando un par de aficionados de Chicago a los cómics de Marvel lanzaron un fanzine llamado (lo adivinaste) Fanboy, amalgama de fan y funboy (un término humorístico de la época).

Hasta entonces, los aficionados a lo que hoy conocemos como "frikerío" eran simples fans. Con Fanboy, los autores de esta revistilla fotocopiada no buscaban insultar a nadie, sino representarse a sí mismos y contactar con otros superfans de las historietas. Estaban riéndose de sí mismos de forma positiva, igual que hoy en día numerosos usuarios de los productos de Apple adoptan la etiqueta no con intención lesiva, sino identificativa o incluso como motivo de orgullo.

Dada la conexión entre la informática, los jóvenes y la cultura popular, de cuya intersección nace el "frikismo" actual, la palabra fanboy no tardaría mucho en ser lanzada como insulto. Aunque dicho sea de paso, antes que fanboys estos seguidores irredentos de Apple eran llamados macheads, y es que el culto a Apple comienza con el culto al Mac. Cuando la firma fundada por Steve Jobs todavía se llamaba Apple Computer.

De fabricante de ordenadores a centro de un universo propio

Apple I Computer

La reputación de Apple como marca de referencia y polo de innovación nos lleva al lanzamiento del propio Apple I. No era el primer ordenador personal del mundo ni fue concebido literalmente en un garaje como cuenta la leyenda, pero como sucedería tantas veces más a lo largo de las próximas décadas, su impacto fue tan grande que Apple se convirtió para buena parte del público en la inventora de la informática personal, especialmente en Estados Unidos.

Poco más que una placa soldada artesanalmente, fue seguida por productos revolucionarios y mucho más maduros como el Apple II (1979). Aunque fue en 1984 cuando Steve Jobs dejó boquiabierta a la industria con el lanzamiento del Macintosh. En ese momento Apple había dejado de ser una estrella en ascenso para convertirse en algo más. Los fundamentos estéticos y los valores de la marca se habían establecido con un anuncio que aún resuena en la cámara de eco digital que es YouTube.

Dotado con la avanzadísima interfaz gráfica inaugurada por el Apple Lisa, que se convirtió en objeto a imitar por numerosos fabricantes (de nuevo otra constante en la historia de Apple), este elegante ordenador personal compacto perviviría en numerosas facultades españolas hasta bien entrada la década de los 90. Así de grande fue su impacto incluso en países donde Apple no era particularmente conocida.

Iphone Newton

Por el camino quedaron dispositivos que a lo mejor no lograron el éxito deseado, pero solo sirvieron para acrecentar la fama de Apple como innovadora sin fin. Así tenemos por ejemplo el Newton, un intento por crear una tableta en 1993.

Se puede considerar el predecesor del iPad, pero también representa una moraleja que Apple ha seguido a pies juntillas desde entonces: nunca lances un producto hasta que sepas que va a funcionar bien. Eso que luego se resumió como eslogan con "It just works".

Dicho esto, Apple no estaba en su mejor momento cuando el Newton salió a la venta. Los macheads eran cada vez menos hasta que Steve Jobs regresó triunfante a la compañía que ayudó a fundar y dio un golpe sobre la mesa con su primer icono moderno: el iMac. Que además, también fue uno de los primeros productos importantes desarrollados por Jony Ive. Y el mundo se volvió loco.

Imac

Con todo, el fenómeno fanboy no llegaría hasta 2001 con el lanzamiento del iPod. Que no era el primer reproductor MP3, pero sí el primero genuinamente intuitivo y agradable de usar. De repente, Apple dejó de ser una empresa estrictamente informática. Estaba vendiendo un ecosistema de dispositivos. Y, con el lanzamiento de iTunes en el año 2003, dicho ecosistema también paso a integrar servicios.

Poco después, en 2007, llegó el iPhone. Ya nada fue igual.

El iPhone, como el Apple I, no fue el primer smartphone. Tampoco fue el primero en ofrecer reproducción multimedia o pantalla táctil. De hecho, el copiar y pegar ni siquiera llegó hasta 2009, con algo que Apple llamaba "iPhone OS 3.0". Sin embargo, no tardó en poner patas arriba el mercado, definiendo toda una industria y generando legiones de fans incluso entre sus detractores más acérrimos, que se sumaron con la furia del converso.

Cuando Apple es el centro de la vida digital

Apple Ux

El iPhone ejemplifica mejor que otro producto la identidad de Apple, una firma que desde siempre se ha caracterizado por innovar no necesariamente en número de funciones o avances tecnológicos, sino en ofrecer la mejor experiencia de uso. Ahí radica su éxito como empresa y como creadora de tendencias, moviendo masas de nuevos usuarios que rara vez muestran ese nivel de entusiasmo por otras marcas.

Porque, en el fondo, ser un fanboy de Apple para muchos no es necesariamente peyorativo, más bien resulta una forma de entender la vida digital centrada en torno a una marca que da exactamente los productos y servicios que necesita de la forma más intuitiva y agradable posible. Eso sí, aunque duela a más de uno de estos fanboys, salvando algunos productos como el Mac mini, sus tarifas siempre han sido relativamente elevadas.

Desde los tiempos de Steve Jobs la compañía ha dibujado una política de precios altos con márgenes de beneficios superiores a la media. A la postre, ha resultado ser una de las claves del éxito, puesto que le ha permitido financiar aventuras de otra forma muy costosas, como el desarrollo de sus propios chipsets ARM, y otras creaciones más recientes, como los procesadores del enclave seguro.

Con los descuentos de Phone House, es más fácil declararte fanboy

Iphone Apple S

Con todo, es posible encontrar dispositivos de Apple a precios realmente asequibles. Porque ser un fanboy no implica estar dispuesto a pagar cualquier cantidad de dinero, sino simplemente ser un entusiasta de pies a cabeza. Y aquí tenemos para demostrarlo las ofertas de Phone House, que ofrece descuentos de hasta el 43% durante toda la semana, evitando así los atropellos y dudas del Black Friday**.

De esta forma, por ejemplo, es posible encontrar el iPhone XS Max de 64 GB por 1.150,83 €, lo que supone una jugosa rebaja del 8,6% con respecto a su PVP habitual. Los recortes son aproximadamente igual de acentuados en el caso del iPhone XR 64 GB, que cae temporalmente un 9% y se queda en unos muy apetecibles 781 euros.

Estas ofertas llegan también a modelos anteriores, pero plenamente capaces como el iPhone X (por menos de 950 € el modelo de 64 GB) y el iPhone 8 (por poco más de 600 euros en su variante de 64 GB, lo que supone una rebaja de más del 8%). Asimismo sobresale el recorte del 9,10% de los iPhone XS 64 y 512 GB.

Apple Applesfera

Los modelos más veteranos disfrutan de los descuentos más ventajosos. Lo cual es una excelente noticia para los neófitos, puesto que los teléfonos de Apple representan mejor que ningún otro eso de que la edad es solo un número. Ahí queda el ejemplo del iPhone 6 S Plus de 32 GB, que rivaliza con dispositivos Android actuales y tiene un potentísimo descuento del 43,7% en Phone House, que deja su precio 371,59 euros. Por su parte, el iPhone SE, último de los "pata negra" en formato mini, puede ser tuyo por 282,42 euros.

Tanto si buscas un iPhone de última generación como si ansías echar el guante al codiciado SE antes de que desaparezca, Phone House tiene grandes ofertas. Y todos los precios son válidos tanto a través de Internet como en sus tiendas, así que ya no hay excusa para unirse a una tribu formada por más de 1.300 millones de usuarios. Muchos de los cuales no se avergüenzan de ser llamados fanboys.

Imagen | Bhob Stewart/Technologizer, Stock, Ed Uthman, Wikipedia (1, 2), Applesfera, Apple

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