Para entusiastas como nosotros, configurar un Mac para que trabaje acorde a nuestras necesidades es algo relativamente sencillo y que incluso nos gusta hacer. Pero para aquellas personas que no quieren lidiar con la tecnología o simplemente no tienen tiempo para ello puede ser una tarea ignorada que puede desembocar en un problema.
Llevo desde 2010 ayudando profesionalmente a los usuarios generales a hacerlo, e incluso a algunas pequeñas empresas para que sus Mac funcionen de la forma más óptima posible. Y con los centenares de casos a los que me he enfrentado, estas son las mejoras más comunes y que más beneficio aportan en los Mac de cualquier generación.
Si lo cuidas, iCloud Drive no es un enemigo
Muchos usuarios generales detestan iCloud Drive por que de él sólo reciben advertencias tanto en el Mac como en el iPhone. Hubo una época en la que colocar las carpetas Documentos y Escritorio en iCloud Drive estaba activa por defecto, cosa que ha causado estragos en aquellas personas que no saben diferenciar el almacenamiento local del almacenamiento en la nube.
Si aprendes a distinguir qué se guarda en iCloud y qué se guarda en el almacenamiento local, tendrás una mejor idea de cómo gestionas y almacenas tus datos personales. También suele ser el punto de origen para que una mejor organización te ayude a ahorrar espacio en la nube y reducir la suscripción que estabas pagando.
El click secundario es esencial
Hay algunas costumbres de Apple que nunca mueren, y una de ellas sigue notándose al configurar un nuevo Mac de escritorio como un iMac o un Mac mini. Uses el ratón que uses, ni macOS Sonoma ni ninguna otra versión del sistema activa el click derecho por defecto.
Sí, ese click puede activarse manteniendo pulsada la tecla CTRL mientras haces el click principal, pero muchos usuarios vienen acostumbrados del click derecho de Windows y agradecen que éste pueda activarse en macOS a través de sus Ajustes, sección 'Ratón'.
Y ya que estamos, también es bueno desactivar el click para esconder todas las ventanas y mostrar el escritorio en macOS Sonoma. Estoy viendo a muchas personas confundidas por este cambio.
Si entiendes Finder, te orientarás mejor
Muchos usuarios generales pecan de no investigar dónde se almacenan los archivos que se guardan en el Mac. Eso hace que la carpeta Descargas esté llena, que se dependa demasiado de la sección 'Recientes' y que no sepas bien dónde localizarlo todo. Las generaciones más jóvenes, más acostumbradas a un iPhone y un iPad, también cometen ese error.
Es muy sencillo: basta con configurar la barra lateral del Finder para que el usuario se sitúa siempre. Que sepa que la carpeta principal es la que lleva su nombre y el icono de una casa, y que en las subcarpetas que hay dentro están todos sus archivos. Y que todo lo que se guarda en iCloud Drive, en realidad está en la nube.
Las aplicaciones esenciales pueden ahorrarte dolores de cabeza
Algo que siempre suelo hacer en los ordenadores de mis clientes es comprobar si tienen instaladas las siguientes aplicaciones, e instalarlas si no es el caso:
- VLC Media Player es el reproductor que siempre recomiendo, ya que es compatible con todos los formatos de vídeo que puedas llegar a recibir.
- WhatsApp en macOS es una herramienta indispensable, especialmente cuando quieres enviar mensajes largos en un chat o un grupo.
- AppCleaner es una excelente herramienta gratuita que nos permite desinstalar aplicaciones en macOS toda la morralla que dejan las aplicaciones detrás si las enviamos a la papelera directamente. Usada en cada desinstalación nos garantiza que nuestro Mac se mantendrá libre de demasiado espacio en los subdirectorios del sistema.
Con estas cuatro explicaciones y revisiones básicas, consigo que al usuario le queden las cosas más claras y que su relación con el Mac mejore a varios niveles. Para el ojo experimentado esto es muy básico, pero para el resto de personas puede ser la diferencia entre usar un Mac con miedo o dominarlo mucho más.
Imagen | Devon Janse van Rensburg
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