¿Recuerdas cuando en España estuvo a punto de desaparecer Telegram? Estuvimos todo un fin de semana en tensión con amenazas de "tumbar" la aplicación por distribuir contenido ilegal de plataformas de series y películas en ellas. Finalmente no se tomó una decisión tan drástica y se prefirió investigar el origen de esos grupos de difusión.
Ahora en 2024 el multimillonario ruso y cofundador de Telegram (Pável Dúrov) ha sido detenido en París en un momento en que su plataforma se encuentra en el centro de la controversia mundial. Pável ha hecho de la libertad y la privacidad internet su bandera, tanto que ahora se enfrenta a la posibilidad de perder la suya. Su arresto no solo es un golpe para él, sino para todos aquellos que somos usuarios de dicha aplicación.
Los inicios de Telegram fuera de Rusia
Dúrov fundó Telegram en 2013 junto a su hermano Nikolai tras huir de Rusia y vender su participación en la red social (que también crearon) VKontakte. Desde su inicio, Telegram se diseñó con un propósito claro: ofrecer a los usuarios una herramienta de comunicación que fuera resistente a la censura y priorizara la privacidad.
La aplicación permite la creación de grupos con hasta 200.000 miembros y ofrece un nivel de encriptación muy alto. Tanto que ha sido clave para su adopción por parte de activistas, periodistas y ciudadanos en países con gobiernos autoritarios. Esta libertad de comunicación, sin embargo, también ha hecho que la plataforma sea un objetivo para las autoridades que buscan limitar la difusión de ciertos contenidos.
En 2021 hubo un punto de inflexión
En 2021, Telegram experimentó un crecimiento explosivo tras el asalto al Capitolio en Estados Unidos. Con las principales redes sociales aplicando medidas severas contra aquellos que incitaban a la violencia o propagaban desinformación, millones de usuarios migraron a Telegram en busca de un espacio sin restricciones.
En apenas unos días, la plataforma creció en 25 millones de nuevos usuarios. Esta afluencia masiva no solo consolidó a Telegram como una alternativa viable a servicios como WhatsApp, sino que también atrajo a grupos y activistas que encontraron en Telegram una plataforma sin limitaciones.
La detención de Dúrov y el futuro incierto de Telegram
El arresto de Pável Dúrov en el aeropuerto de Le Bourget, en las afueras de París, es el resultado de una investigación que acusa a Telegram de no colaborar lo suficiente con las autoridades en la lucha contra actividades delictivas que se desarrollan en la plataforma. Desde redes de pederastia hasta tráfico de drogas y crimen organizado. Desde Francia han señalado a Telegram como un espacio donde estas actividades pueden proliferar sin control. La negativa de Dúrov a comprometer la privacidad de sus usuarios lo ha llevado a enfrentar cargos de obstrucción a la justicia. Estos son los doce delitos por los que se le acusa:
- Complicidad en la administración de una plataforma en línea para transacciones ilícitas en grupo organizado.
- Negativa a entregar información requerida por las autoridades para interceptaciones legales.
- Posesión de imágenes pornográficas de menores.
- Distribución o puesta a disposición de imágenes pornográficas de menores en grupo organizado.
- Adquisición, transporte, posesión, oferta o venta de drogas.
- Oferta de equipos, herramientas o programas para dañar sistemas de datos sin justificación.
- Complicidad en estafas en grupo organizado.
- Asociación criminal con el fin de cometer delitos graves.
- Blanqueo de beneficios obtenidos de delitos en grupo organizado.
- Provisión de servicios de criptografía sin certificación adecuada.
- Entrega de herramientas de criptografía sin asegurar autenticación o integridad.
- Importación de herramientas de criptografía sin la declaración necesaria.
Tras haberle tomado declaración en París y estar imputado por lo delitos anteriores, Pável ha sido puesto bajo vigilancia judicial, con la obligación de depositar una fianza de 5 millones de euros. A cambio de deberá presentarse ante la policía dos veces por semana y tiene prohibido salir del territorio francés.
En cuanto a la legalidad sobre tener Telegram en el iPhone, no hay ningún problema: puedes descargar y usar la aplicación sin que eso sea ilegal. Telegram está disponible en la App Store y no enfrenta restricciones legales específicas en la mayoría de los países. Yo la uso a diario para hablar con amigos y me gusta muchísimo más que WhatsApp.
Sin embargo, eso no quiere decir que la plataforma no esté en el punto de mira. La situación de Telegram podría cambiar, dependiendo de cómo Dúrov y su equipo manejen las presiones legales. Telegram no va a desaparecer de inmediato, pero si podría enfrentarse a modificaciones en sus políticas de uso, o incluso limitaciones regionales como se intentaron hacer en España hace pocos meses.
Elon Musk ya ha salido a apoyar a Pável Dúrov. ¿Pero dónde está el límite? La aplicación en sí no es ningún problema pero si las prácticas delictivas que pueden llevarse a cabo en ellas. Y si la aplicación no toma ninguna medida, ¿entonces el problema es de la app?
En Applesfera | Cero dudas en cuál es la mejor app de videollamadas para el iPhone. Llevo años usándola y no cambiaré de opinión
En Applesfera | iPhone 16: fecha de lanzamiento, precio, modelos y todo lo que creemos saber sobre ellos
Ver 13 comentarios