Hoy es un día especialmente emotivo para mí. Tras 16 años y dos meses, hoy es mi última jornada como editor fijo en Applesfera. Este artículo es el último que firmo como tal, de modo que comprenderéis el cariño con el que estoy tecleando estas palabras. Considero este medio mi hogar. He crecido con él, y por lo tanto nunca dejaré de considerarlo mi casa por muchos años que pasen.
Apenas se había presentado el iPhone cuando empecé a escribir artículos en esta web (el primero de ellos trataba sobre el rumor de un "Mac ultraportátil", imagínate), y he asistido a la evolución de una compañía que ha pasado de ser conocida por los Mac y los iPod a ser de las más valiosas a nivel mundial gracias en gran parte a los iPhone. Quiero aprovechar este momento para recordar la Apple sobre la que he tenido el privilegio de escribir aquí, y hablar de la Apple que me gustaría ver en el futuro.
La Apple que recuerdo y aprecio
Recuerdo esos primeros meses escribiendo aquí. Eran los días en los que asistíamos al nacimiento de algo que se convertiría en toda una revolución: el iPhone y la App Store. La primera vez que toqué la interfaz multitáctil fue con un iPod touch, junto a mi padre en su despacho, y recuerdo maravillarme con la respuesta táctil y la magia de la interfaz del primer iPhone OS.
En ese momento tuve claro que Apple había dado en el clavo: eso era el futuro de los dispositivos móviles. De repente, los avances tecnológicos alcanzados con los Mac y los iPod habían dejado de ser tan impresionantes. Con el tiempo los iPhone avanzarían a una velocidad vertiginosa, con Android avanzando a su sombra. La innovación y las pautas a seguir salían constantemente de Cupertino.
Durante mi periplo aquí he asistido a esa evolución, he visto inaugurarse las primeras Apple Store españolas, he visto la llegada del iPad, de los Apple Watch, de los servicios como Apple TV+ y Apple Music. Ver la transición de Apple Computer Inc. a Apple Inc a medida que sus dispositivos se iban haciendo más y más populares. Puedo decir que he vivido en primera fila los años en los que conceptos como una "app" pasaban a ser conocidos por todo el mundo y no solamente por los maqueros más acérrimos a la marca. Gracias, Steve. Gracias, Tim.
La Apple que quiero ver de ahora en adelante
Hace unos años escribí un artículo en el que imaginaba cómo iba a ser la Apple de 2027, justo en el vigésimo aniversario del iPhone. Es divertido leerlo ahora, tres años antes de que ese momento llegue. Me imaginaba coches autónomos controlados por Siri, y unos iPhone que se convertían en la CPU y GPU de cualquier otro dispositivo con una pantalla más grande que lleváramos encima.
A comienzos de 2024 ese futuro pinta muy diferente, queda claro que no soy un adivino. Si tuviera que reescribir ese artículo ahora describiría un futuro 2027 en el que todos llevamos encima una evolución de las Vision Pro, y en la que lamentablemente no hay coches de Apple visto lo visto.
Ahora bien, más que imaginarme la Apple del futuro, prefiero desear la que me gustaría ver. Si algo tengo que decir sobre la evolución de internet desde mis comienzos aquí en 2007, es que hemos pasado de una red de aplicaciones y servicios amigables a una más hostil, más cubierta de algoritmos, que exprime más al usuario a costa de su tiempo y su dinero. Más amenazante: ahora debemos tener cuidado en todas partes. La IA lo revoluciona todo, pero también imita a algún familiar para fingir que necesita ayuda en una llamada falsa. Empiezo a ver una realidad que antes consideraba una distopía.
En otras palabras: ahora los internautas pasan más allá de ser simples usuarios y se convierten en adictos para ciertos actores. Por eso me gusta que la Unión Europea tome cartas en el asunto. Ante el descontrol, regulación.
En base a eso, me gustaría pedirle a la Apple del futuro que mantenga el respeto al usuario. Que siga lanzando medidas que le motiven a cuidar el uso que le da a las aplicaciones y servicios, que evite acercarse demasiado a la pantalla y que le ayude a recuperar esa capacidad de enfoque que hemos ido perdiendo con los años. Porque las Vision Pro prometen mucho, pero lo empeorarán todo si los usuarios eligen usarlo para ver TikTok, YouTube y jugar a algo simultáneamente.
Mi eterno agradecimiento es para ti
Cuando empecé en Applesfera un 1 de enero de 2008, éramos simplemente un blog. Una web la mar de simple en la que se redactaban artículos cortos sobre la actualidad y los rumores de Apple. 16 años y 2 meses después, Applesfera se ha convertido en el medio hispanoparlante sobre Apple más leído del mundo. Tenemos actualidad, análisis, opiniones, tutoriales, vídeos en directo y dos podcasts. Haber contribuido a eso me llena de orgullo.
Pero ese crecimiento no habría sido posible sin ti, que sigues aquí después de todo este tiempo. Sin ti, nada de esto habría sido posible. Así que te doy las gracias por haberme acompañado siguiendo la actualidad y evolución de Apple durante todo este tiempo. No desaparezco, estaré en las redes sociales. Dando un paso al lado y poniéndome al lado de los lectores, quizás buscando mi propio camino para seguir participando en el debate con todos vosotros.
Tiene gracia: empecé en el comienzo de la revolución de los iPhone. Y ahora termino al principio de lo que puede ser la revolución de la computación espacial. Porque sí, cuando probé las Vision Pro me dio la misma sensación de estar usando algo que puede convertirse en una nueva revolución. Ya no trabajaré informando de ello desde aquí, pero no dudo en que lo seguiré con entusiasmo comentándolo con todos vosotros.
Que comiencen las keynotes. ¿Quién se apunta a verlas con un buen cuenco de palomitas? ¡Nos vemos en alguna ventana flotante de visionOS! Podréis encontrarme en mi cuenta de Twitter o mi Instagram, o si preferís algo más tranquilo, en Mastodon.
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